«Yo apelo a la sensatez, porque están perjudicando la calidad de vida de sus propios conciudadanos cuando impiden el intercambio de negocios que se hace entre República Dominicana y Haití», dijo Lizardo en una conferencia de prensa para presentar el programa de actos con motivo del 106 aniversario del natalicio del fundador de ese partido, Juan Bosch.
A su vez, rechazó la opinión de que la República Dominicana es un país «racista», algo que demuestra la solidaridad demostrada con Haití.
Además opinó que en relación al ordenamiento de la situación migratoria en el país «ha estado actuando acorde con lo que establece la ley, se dieron los plazos convenidos y todo el pueblo dominicano sabe muy bien que hemos sido los primeros en acudir en apoyo de los hermanos haitianos».
El Departamento de Estado de Estados Unidos denunció ayer la «discriminación» contra los inmigrantes haitianos y sus descendientes en República Dominicana como la violación «más grave» de derechos humanos en ese país en 2014.
«La sentencia que estipula que los descendientes de individuos considerados ilegales en el país, muchos de los cuales son de origen haitiano, no tienen derecho a la nacionalidad dominicana», indica el informe.
El documento, que sirve como guía al Congreso estadounidense a la hora de decidir la ayuda exterior para cada país, examina el comportamiento de los Gobiernos de todo el mundo (menos de EEUU) respecto a los derechos humanos.
A este respecto, Lizardo aseguró que el gobierno está cumpliendo con lo que establece la ley respetando los derechos humanos. EFE