Divac despide a Dave Joerger

El serbio, recién renovado por Sacramento hasta 2023 como general manager, ha decidido cambiar por completo el organigrama del equipo

SACRAMENTO.- Dave Joerger apenas ha durado unas horas como entrenador de Sacramento Kings tras el cierre de la temporada regular. Vlade Divac, a quien la franquicia californiana ha extendido su contrato hasta el curso 2022-23, ha decidido pocas horas después de ser renovado el despido del que ha sido técnico del equipo desde 2016, tal y como adelantaba Adrian Wojnarowski de ESPN y hacía oficial el equipo después.

“Tras evaluar la temporada, he decidido que necesitamos movernos en otra dirección para así conseguir dar el salto al siguiente nivel. En representación de toda la organización de los Kings, quiero dar las gracias a Dave por su contribución al equipo y desearle lo mejor para el futuro”, señala Divac en el comunicado oficial de la franquicia.

Esta determinación ha llegado pese a que Sacramento, con Joerger al mando del banquillo, ha cerrado la campaña con un balance de 39 victorias y 43 derrotas, o lo que es lo mismo, el mejor desde el curso 2005-06. No ha impresionado a Divac. El ejecutivo, quien ha visto consolidado su poder tras la renovación, quiere formar a su alrededor un nuevo equipo a su gusto.

Con esa meta, el ex jugador ha prescindido también de los servicios del general manager asistente Brandon Williams, así como del director de relaciones con los medios, Chris Clark. El terremoto en la capital de California es tal como para que el adiós de gran parte de su personal se esté dando a la carrera. Casi no ha terminado la regular season y la limpia es un hecho.

Volviendo al repentino despido de Joerger –Wojnarowski señala que Divac tiene hasta preparada una reunión posterior con los jugadores–, el motivo de tal determinación no se encontraría por supuesto en el rendimiento del conjunto, sino en desacuerdos en cuanto al uso de la plantilla.

Es una historia que viene de lejos. Ya en enero, justo a mitad de temporada, Chris Haynes apuntaba a que Joerger podía ser despedido ipso facto. No ocurrió, pero sí que quedó clara la poca sintonía entre técnico y oficina cuando el primero expulsó del entrenamiento a un ayudante de Divac; exactamente Brandon Williams, ahora también despedido. ¿Por qué hizo Joerger tal cosa? Pues porque a tal asistente se le situó como instigador del rumor de su adiós forzado, deslizando además que la razón sería el hecho de que no estuviese dando al talento joven el espacio que merecía.

Y es que en el fondo de toda esta tempestad hay un nombre propio: Marvin Bagley III. Número 2 del Draft de 2018, este chico formado en la Universidad de Duke ha visto casi toda la temporada formando parte de la segunda unidad, siendo titular únicamente en cuatro partidos de 62. Desde los despachos, por más que presionaron, no lograron que Joerger cambiase de opinión.

Posibles sustitutos

La marcha de Joerger ha ido a tal velocidad que ya hay varios nombres sobre la mesa para reemplazarlo. El primero que suena, según señalan tanto Marc Stein de The New York Times como Sam Amick de USA Today, se trata de Luke Walton. Siendo todavía entrenador de Los Angeles Lakers, todos los informes apuntan a que no continuará al frente del equipo. Si es así, sería la primera opción de los Kings para sustituir a Joerger.

Pero hay más aspirantes. Tal y como apunta Sam Amick, el antiguo entrenador jefe de New Orleans Pelicans, Monty Williams, así como el entrenador asistente de San Antonio Spurs, Ettore Messina, serían tomados muy en consideración para cubrir la vacante.

¿Rumbo a Minnesota?

Joerger ha sido despedido, pero podría no tardar mucho tiempo en encontrar trabajo. Nacido y criado en Minnesota, los Timberwolves podrían ver en él a la persona idónea para tomar el mando del equipo. En estos momentos, y de manera interina, el técnico es Ryan Saunders, quien podría continuar en el cargo. Sin embargo, es más probable que los Wolves barajen varias opciones antes de decidir; y si es así, Joerger podría ser considerado. Él estaría encantado. En enero, justo después de que Tom Thibodeau fuese despedido, definió como “interesante” la opción de dirigir a los Minnesota Timberwolves. Ahora esa predisposición debe haberse multiplicado.

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